Vitamina D: ¿Para qué sirve y cuándo debes tomarla?
La vitamina D es una poderosa aliada para fortalecer algunas funciones esenciales en nuestro cuerpo. Conocida como la “vitamina del sol”, no solo la podemos obtener a través de este, sino también en algunos alimentos de origen animal.
En esta ocasión, te contamos más sobre esta vitamina: para qué sirve, importancia, cómo saber si la necesitamos, y dónde podemos obtenerla.
¿Para qué sirve la vitamina D?
La Vitamina D es una vitamina liposoluble (soluble en sustancias grasas) que se produce naturalmente en el cuerpo a partir de la exposición al sol. Como mencionamos al inicio, también podemos adquirirla en alimentos como la yema de huevo, pescado, salmón, aceite de hígado de bacalao, y la leche.
Igualmente, esta vitamina es necesaria para varios procesos en el organismo, y por ello, es muy importante que su concentración en la sangre sea la correcta según la edad de la persona, así como si está embarazada, pasando por la menopausia, entre otros.
Una de sus funciones más importantes, es que aumenta la absorción de calcio y fósforo en el intestino y disminuye su eliminación en la orina, favoreciendo así la mineralización de huesos y dientes.
También juega un papel importante en el sistema inmune, pues vitamina D estimula el sistema inmunitario al actuar sobre algunos tipos de células inmunitarias pertenecientes a los glóbulos blancos.
¿Por qué es importante?
Una deficiencia profunda de vitamina D puede provocar raquitismo (debilitamiento en los huesos) en niños o incluso descalcificación ósea en adultos (osteomalacia), aunque esto es muy raro. También es importante durante la menopausia en las mujeres mayores.
Una menor carencia, o un déficit, exponen a un mayor riesgo de osteoporosis y fracturas sino también a un debilitamiento de los músculos, de ahí una mayor probabilidad de caídas, especialmente entre los más ancianos.
En este sentido, una deficiencia de vitamina D puede desencadenar los siguientes problemas:
- Mayor riesgo de fractura en los huesos.
- Niveles bajos de calcio y fósforo en la sangre.
- Dolor y debilidad muscular.
- Deficiencia en el sistema inmunológico, por lo que estarás más propenso a sufrir infecciones, virus, bacterias, entre otros.
Señales de que puedes necesitar tomar vitamina D
Si te encuentras en una de zona en donde no sale mucho el sol, es posible cuentes con bajos índices de vitamina D. La población vegana también suele presentar falta de vitamina D al no consumir alimentos de origen animal.
Además, las personas de piel oscura, los niños y las personas mayores también se encuentran entre quienes puedan tener deficiencias, al igual que las personas obesas, ya que la vitamina D está retenida en la grasa.
Si bien es posible optar por un suplemento alimenticio de esta vitamina, una dosificación no supervisada por un médico puede crear problemas de sobredosis de vitamina D. Esto es importante, ya que el consumo debe estar regulado en función de la edad de la persona y su perfil alimenticio o de salud específicos.
¿Dónde y cómo absorber la vitamina D?
Para terminar, te contamos algunas recomendaciones para sintetizar esta vitamina naturalmente. Como ya sabemos, la principal fuente de la vitamina D es la exposición a la radiación solar, y dependiendo de tu tono de piel, se recomienda un tiempo determinado:
- Personas de piel clara: tomar sol al menos 15 minutos al día.
- Personas de piel oscura: al menos una 1 hora.
Las horas del día más ideales para obtener esta vitamina mediante la exposición al sol, es entre las 10 am y las 12 pm y las 3 pm y las 4:30 pm, ya que el sol es menos intenso a esa hora. Además, no dejes de consumir los alimentos que favorecen su producción durante las temporadas de poco sol.
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